Uno de los gadgets que pensaba que arrasarían este mismo año 2008 eran los mandos a distancia universales y con pantalla táctil. Del estilo del Logitech Harmony. De esos dos deseos me tendría que quedar con uno solo cumplido: el mando universal, pero no como pensaba, sino universal de cada marca. Efectivamente, con la tecnología HDMI, no hay marca de electrónica de consumo que no haya unido los mandos a distancia de todos sus televisores, reproductores, sistemas de cine en casa, y poder usar solamente uno de ellos. Pero claro, en la mayoría de los casos todos los equipos deben ser de la misma marca.
El no arranque de los mandos a distancia universales con pantalla táctil se lo podríamos achacar al alto precio que hasta ahora tienen los mismos. El nuevo Philips Prestigo SRT9320 no viene tampoco a acabar con esa tendencia, pues se presenta como un mando con pantalla de 2.8 pulgadas, a color, y que compagina tanto los clásicos botones como la más actual tecnología táctil, pero a un precio de 250 dólares que no mucha gente está dispuesta a pagar.
Como otros mandos similares, el Philips Prestigo aglutina en la parte táctil iconos de los programas así como instrucciones agrupadas del tipo grabar en DVD, que enciende el televisor y el DVD y lo deja listo para empezar a grabar.
El Philips SRT9320 permite que controlemos hasta 20 canales de televisión y por supuesto es programable a nuesrto antojo. Al contrario que el Logitech Harmony, no necesitamos de un ordenador para programar acciones o cambiar la configuración del mando a distancia. Personalmente es una opción que me gusta por la facilidad. Ya veremos si Philips ha logrado que en su mando todo sea tan intuitivo y gráfico sin necesidad de ordenador de por medio. Pese a ello, contamos con un puerto USB destinado a poder actualizar el software del Prestigo.
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